Quédate,
en la tarde de sábado
esta casa está quieta
y sólo las abejas
en los ciruelos zumban.
Descálzate,
encontraremos luego
alguna forma nueva de hacer todas las cosas.
Para premiarme sola
deja escuchar mis uñas
arañando tu barba;
déjame hurgar tus ropas
hasta encontrar tu pecho;
déjame que te muerda
los brazos y las piernas;
deja pasear mi boca
por tu vientre caliente
y hurgar tus genitales
como piezas preciosas.
Quédate así un momento,
sobre tu cuerpo prieto
soñar quiero un instante.
Vete,
Si una pinta morada
te encuentran en la boca
o una leve mordida
sobre el pecho
o el vientre,
explica que volviste
por sendas diferentes
y que un gato del monte
saltó sobre tu cuerpo.
en la tarde de sábado
esta casa está quieta
y sólo las abejas
en los ciruelos zumban.
Descálzate,
encontraremos luego
alguna forma nueva de hacer todas las cosas.
Para premiarme sola
deja escuchar mis uñas
arañando tu barba;
déjame hurgar tus ropas
hasta encontrar tu pecho;
déjame que te muerda
los brazos y las piernas;
deja pasear mi boca
por tu vientre caliente
y hurgar tus genitales
como piezas preciosas.
Quédate así un momento,
sobre tu cuerpo prieto
soñar quiero un instante.
Vete,
Si una pinta morada
te encuentran en la boca
o una leve mordida
sobre el pecho
o el vientre,
explica que volviste
por sendas diferentes
y que un gato del monte
saltó sobre tu cuerpo.
1 comentario:
excelente texto de esta poeta, sugerente y melodioso.
http//monopoesia.blogspot.com
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